Consulta Nacional, sin valor legalLa consulta nacional sobre el futuro de PEMEX, propuesta por el tándem López Obrador-Ebrard, se desdibuja, a pesar del intenso ruido mediático que sus promotores han logrado meter. Día con día crece la lista de opositores a la realización de éste ejercicio, que no tiene valor legal alguno, y que para muchos constituye sólo una estrategia para descarrilar las ya descarriladas iniciativas para la reforma energética, que envió el presidente Calderón al Congreso el pasado mes de abril.
En el Senado de la República, donde se discutió el asunto a mitad d.e la semana, los legisladores del Frente Amplio Progresista, que apoyan entusiastas la idea de una consulta nacional, se llevaron un sonoro revés. El líder de la bancada priísta, Manlio Fabio Beltrones; y el flamante coordinador del grupo panista, Gustavo Enrique Madero, dejaron sin respaldo una propuesta del PRD, PT y Convergencia que buscaba involucrar a la UNAM en la elaboración de las preguntas de la consulta nacional.
Los frentistas solicitan también que el IFE sea el encargado de realizarla y que se pida la Cámara de Diputados un “presupuesto extraordinario” para realizar la tarea. El chasco se lo llevaron cuando Beltrones les hizo saber que el tricolor, sin el cual no hay mayoría posible, no acompañaba esta idea.
“Sería inconveniente que trabajásemos en un mecanismo adicional de consulta. Dejemos primero que terminen los foros sobre la reforma energética, para concluir hasta el final si es necesario o no llevar a cabo un trabajo de consulta como el que algunos, de manera precipitada, están proponiendo” declaró el priísta Beltrones, en rueda de prensa posterior.
Esta postura, junto con el rechazo tajante de Madero, provocó una airada respuesta del senador Carlos Navarrte, coordinador de la bancada perredista. “La consulta popular va, y nadie la va a parar”, aseguró el legislador guanajuatense. Abundó: “Que el PAN se quede observando nuestro esfuerzo y que el PRI haga sus cálculos, pero los mexicanos van a ser consultados sobre el tema del petróleo”, insistió.
Dante Delgado, de Convergencia, se sumó a Navarrete. El veracruzano exigió que a la agenda del periodo extraordinario de sesiones que el Congreso inicia esta semana se suba el tema de la democracia directa, que incluya el referéndum, el plebiscito; la consulta popular y la revocación de mandato. “Nuestro compromiso es darle a la sociedad la oportunidad de que en temas relevantes de la economía, desarrollo social, pueda opinar la comunidad en su conjunto”, dijo.
Pablo Gómez, perredista, lamentó que los legisladores se nieguen a escuchar el punto de vista de la sociedad, en un tema tan importante como es el futuro de la paraestatal. “Para mi, como senador del Distrito Federal, la consulta que hará Marcelo Ebrard es vínculatoria. Si cada Estado hiciera su propia consulta, el resultado tendria que ser vnculatorio para todos los senadores”
***
El tema tuvo otros capítulos controvertidos en la semana que terminó. Cuatro consejeros del Instituto Electoral del Distrito Federal, entre ellos su presidente, Isidro Cisneros, firmaron un convenio de colaboración con el GDF para la realización de la consulta en el Distrito Federal, el 27 de julio, sin debatir el tema en la Junta Ejecutiva del Instituto, ni en el Consejo.
El anuncio, dado a conocer con bombo y platillo, provocó una fuerte reacción entre integrantes de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Jorge Díaz Cuervo, recientemente destituido como coordinador de la Coalición Socialdemócrata en ése órgano de representación ciudadana declaró a Vértigo que Cisneros y los otros tres consejeros que firmaron el convenio “Por sus pistolas está llevando el tema del Convenio”.
El diputado local no se anduvo por las ramas. En la charla con este semanario, advirtió a Cisneros y a los otros tres consejeros firmantes, que su proceder puede generar acusaciones por “desvío” de recursos públicos. “El Instituto no tiene atribuciones, no tiene facultades, ni siquiera como coadyudante, para organizar una consulta de esa naturaleza; mucho menos recursos”, puntualizó.El convenio compromete al IEDF a prestar los crayones, facilitar la utilización de las 40 coordinaciones distritales, así como asesoría necesaria, capacitación a los ciudadanos que participarán en la jornada, pero también hacer el conteo y emitir los resultados, según el comunicado del propio Instituto.
La Asamblea, sin embargo, nombró una Comisión, de la que forma parte Víctor Hugo Círigo, coordinador del grupo perredista y destacado miembro de Nueva Izquierda, encargada de elaborar un programa de actividades alrededor de la consulta.
-- ¿Le van a meter lana o recursos materiales? – le preguntamos a Círigo.
-- Vamos a revisar esa posibilidad con el diputado Morgan (presidente de la Comisión de Participación Ciudadana) El acuerdo que se aprobó en la permanente habla de dar las facilidades y apoyos que se requiera para que la Asamblea se pueda involucrar en ése ejercicio. Principalmente a partir de que nuestros módulos puedan convertirse en receptores o promotores de la consulta.
Círigo está conciente de que la consulta no tiene efectos vinculatorios, pero dice que si los capitalinos acuden masivamente a dar su opinión “eso no deja de tener peso”. A pesar de que son adversarios en la disputa por la presidencia nacional del PRD, el presidente
Marcelo Ebrard, jefe de gobierno del Distrito Federal, y Círigo han mantenido un intenso diálogo alrededor del tema, a pesar de que en la disputa por el control de la presidencia nacional del PRD, se ubican en trincheras opuestas.
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La lista de gobernadores que rechazan la consulta también crece. Sabedores que la atractiva propuesta de consultar a los ciudadanos tiene un claro trasfondo de rentabilidad política, 11 gobernadores (7 del PRI y 4 del PAN) ya se pronunciaron en contra de la consulta. Por si fuera poco a este rechazo se han sumado las dudas de gobernadores perredistas como el guerrerense Zeferino Torreblanca, el michoacano Leonel Godoy y el chiapaneco Juan Sabines. El de Guerrero incluso consideró que era innecesario este ejercicio. “Si participan 3000 ciudadanos sería poco representativo”, dijo.
Andrés Manuel López Obrador, autor original de la propuesta, asegura que por lo menos 500 municipios del país (de más de 2,500) se sumarán a la consulta propuesta por el jefe de gobierno del DF. “Nuestros adversarios verán que no somos unos cuantos, sino que somos millones los ciudadanos que participamos en el Movimiento Nacional por la Defensa del Petróleo”, aseguró el autollamado presidente legítimo.
El Gobierno Federal ha respaldado su rechazo a la consulta nacional, con el argumento de que esa figura no existe en la Constitución. Aseguran que después de que terminen los foros sobre la Reforma Energética que se realizan en el Senado, vendrá el dictamen de las iniciativas del Ejecutivo, que no serán aprobadas tal como legaron, según el ex coordinador de la bancada azul en la Cámara alta, Santiago Creel.
En el Senado de la República, donde se discutió el asunto a mitad d.e la semana, los legisladores del Frente Amplio Progresista, que apoyan entusiastas la idea de una consulta nacional, se llevaron un sonoro revés. El líder de la bancada priísta, Manlio Fabio Beltrones; y el flamante coordinador del grupo panista, Gustavo Enrique Madero, dejaron sin respaldo una propuesta del PRD, PT y Convergencia que buscaba involucrar a la UNAM en la elaboración de las preguntas de la consulta nacional.
Los frentistas solicitan también que el IFE sea el encargado de realizarla y que se pida la Cámara de Diputados un “presupuesto extraordinario” para realizar la tarea. El chasco se lo llevaron cuando Beltrones les hizo saber que el tricolor, sin el cual no hay mayoría posible, no acompañaba esta idea.
“Sería inconveniente que trabajásemos en un mecanismo adicional de consulta. Dejemos primero que terminen los foros sobre la reforma energética, para concluir hasta el final si es necesario o no llevar a cabo un trabajo de consulta como el que algunos, de manera precipitada, están proponiendo” declaró el priísta Beltrones, en rueda de prensa posterior.
Esta postura, junto con el rechazo tajante de Madero, provocó una airada respuesta del senador Carlos Navarrte, coordinador de la bancada perredista. “La consulta popular va, y nadie la va a parar”, aseguró el legislador guanajuatense. Abundó: “Que el PAN se quede observando nuestro esfuerzo y que el PRI haga sus cálculos, pero los mexicanos van a ser consultados sobre el tema del petróleo”, insistió.
Dante Delgado, de Convergencia, se sumó a Navarrete. El veracruzano exigió que a la agenda del periodo extraordinario de sesiones que el Congreso inicia esta semana se suba el tema de la democracia directa, que incluya el referéndum, el plebiscito; la consulta popular y la revocación de mandato. “Nuestro compromiso es darle a la sociedad la oportunidad de que en temas relevantes de la economía, desarrollo social, pueda opinar la comunidad en su conjunto”, dijo.
Pablo Gómez, perredista, lamentó que los legisladores se nieguen a escuchar el punto de vista de la sociedad, en un tema tan importante como es el futuro de la paraestatal. “Para mi, como senador del Distrito Federal, la consulta que hará Marcelo Ebrard es vínculatoria. Si cada Estado hiciera su propia consulta, el resultado tendria que ser vnculatorio para todos los senadores”
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El tema tuvo otros capítulos controvertidos en la semana que terminó. Cuatro consejeros del Instituto Electoral del Distrito Federal, entre ellos su presidente, Isidro Cisneros, firmaron un convenio de colaboración con el GDF para la realización de la consulta en el Distrito Federal, el 27 de julio, sin debatir el tema en la Junta Ejecutiva del Instituto, ni en el Consejo.
El anuncio, dado a conocer con bombo y platillo, provocó una fuerte reacción entre integrantes de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Jorge Díaz Cuervo, recientemente destituido como coordinador de la Coalición Socialdemócrata en ése órgano de representación ciudadana declaró a Vértigo que Cisneros y los otros tres consejeros que firmaron el convenio “Por sus pistolas está llevando el tema del Convenio”.
El diputado local no se anduvo por las ramas. En la charla con este semanario, advirtió a Cisneros y a los otros tres consejeros firmantes, que su proceder puede generar acusaciones por “desvío” de recursos públicos. “El Instituto no tiene atribuciones, no tiene facultades, ni siquiera como coadyudante, para organizar una consulta de esa naturaleza; mucho menos recursos”, puntualizó.El convenio compromete al IEDF a prestar los crayones, facilitar la utilización de las 40 coordinaciones distritales, así como asesoría necesaria, capacitación a los ciudadanos que participarán en la jornada, pero también hacer el conteo y emitir los resultados, según el comunicado del propio Instituto.
La Asamblea, sin embargo, nombró una Comisión, de la que forma parte Víctor Hugo Círigo, coordinador del grupo perredista y destacado miembro de Nueva Izquierda, encargada de elaborar un programa de actividades alrededor de la consulta.
-- ¿Le van a meter lana o recursos materiales? – le preguntamos a Círigo.
-- Vamos a revisar esa posibilidad con el diputado Morgan (presidente de la Comisión de Participación Ciudadana) El acuerdo que se aprobó en la permanente habla de dar las facilidades y apoyos que se requiera para que la Asamblea se pueda involucrar en ése ejercicio. Principalmente a partir de que nuestros módulos puedan convertirse en receptores o promotores de la consulta.
Círigo está conciente de que la consulta no tiene efectos vinculatorios, pero dice que si los capitalinos acuden masivamente a dar su opinión “eso no deja de tener peso”. A pesar de que son adversarios en la disputa por la presidencia nacional del PRD, el presidente
Marcelo Ebrard, jefe de gobierno del Distrito Federal, y Círigo han mantenido un intenso diálogo alrededor del tema, a pesar de que en la disputa por el control de la presidencia nacional del PRD, se ubican en trincheras opuestas.
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La lista de gobernadores que rechazan la consulta también crece. Sabedores que la atractiva propuesta de consultar a los ciudadanos tiene un claro trasfondo de rentabilidad política, 11 gobernadores (7 del PRI y 4 del PAN) ya se pronunciaron en contra de la consulta. Por si fuera poco a este rechazo se han sumado las dudas de gobernadores perredistas como el guerrerense Zeferino Torreblanca, el michoacano Leonel Godoy y el chiapaneco Juan Sabines. El de Guerrero incluso consideró que era innecesario este ejercicio. “Si participan 3000 ciudadanos sería poco representativo”, dijo.
Andrés Manuel López Obrador, autor original de la propuesta, asegura que por lo menos 500 municipios del país (de más de 2,500) se sumarán a la consulta propuesta por el jefe de gobierno del DF. “Nuestros adversarios verán que no somos unos cuantos, sino que somos millones los ciudadanos que participamos en el Movimiento Nacional por la Defensa del Petróleo”, aseguró el autollamado presidente legítimo.
El Gobierno Federal ha respaldado su rechazo a la consulta nacional, con el argumento de que esa figura no existe en la Constitución. Aseguran que después de que terminen los foros sobre la Reforma Energética que se realizan en el Senado, vendrá el dictamen de las iniciativas del Ejecutivo, que no serán aprobadas tal como legaron, según el ex coordinador de la bancada azul en la Cámara alta, Santiago Creel.
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