“El síndrome de la chimoltrufia”

¿Consulta ciudadana o acto partidista?


Una sonrisita burlona apareció en los labios del diputado del PAN, Héctor Larios, cuando escuchó decir al senador perredista, Pablo Gómez, que el resultado de la consulta ciudadana sobre la reforma a PEMEX “es vinculatorio”. ¿Con el voto del uno por ciento de la población? reviró, mordaz, el legislador azul.

Pablo no se quiso quedar con la afrenta. La devolvió la broma montado en las contradicciones mostradas por los panistas desde que empezaron a ser gobierno. “Apenas probaron las mieles del poder y les entró el síndrome de la chimoltrufia (yo como digo una cosa, digo la otra…)”, soltó el perredista.

La escena trascurría afuera del salón de sesiones de la Cámara de Senadores. Fue un miércoles. Día de la Comisión Permanente. El ambiente entre los dos legisladores era relajado, de camaradería, a pesar de sus posiciones encontradas. Sin problemas accedieron a la petición de la fotógrafa de Vértigo, Christa Cowrie, para que posaran juntos.

Otro perredista, Carlos Navarrete, negaba categórico al reportero que la consulta estuviese muy por debajo de las expectativas. “¿Dónde estaban esas expectativas? No dimos cifras precisamente para evitar que después se dijera que fue un fracaso, si no se alcanzaban”, aseguró.

-- ¿Y el millón 200 mil votantes que anunció Manuel Camacho Solís para el Distrito Federal ?—le preguntamos.

-- Fue un resbalón, respondió.

***

Las palabras de Navarrete intentaban esconder una realidad incontrovertible. Hasta la famosa Rayuela, del periódico La Jornada, reconocía al día siguiente de la consulta, en un inusual esfuerzo de objetividad, que el ejercicio había estado por debajo de las expectativas.

Pero esa objetividad se perdía en la primera plana de ese cotidiano de izquierda. Publicó la foto de una casilla en las cercanías de Ciudad Universitaria en la que aparecían cuatro votantes y dos funcionarios. En el pie de foto se leía: “Familias enteras de capitalinos expresaron su opinión”

Otros periódicos, como el conservador Reforma, ponían énfasis en las supuestas irregularidades cometidas durante el ejercicio. “Hacen consulta estilo PRD”, tituló ese periódico, en su primera plana. Excélsior, más neutral, ponía énfasis en el resultado “Conteo inconcluso: el ‘no’ era del 87 por ciento”. “Poca afluencia en las casillas, en el DF y nueve estados”, encabezaba Milenio Diario.

El mismísimo Manuel Camacho Solís, coordinador nacional de la Consulta Energética, no encontró mejor explicación que responsabilizar al gobierno federal y al PAN de haber inhibido la participación ciudadana en este ejercicio. “Si hubiéramos tenido más recursos y si el PAN y el gobierno federal no hubieran utilizado los medios para desacreditar la consulta, la votación se hubiera duplicado”, aseguró.

Al coordinador de la consulta se le habían revertido sus palabras. Antes del ejercicio dijo que si sacaban un millón de participaciones en el DF, estarían pasando “de panzazo”. Las cifras finales arrojaban una participación en la capital de 826 mil 28 participaciones.

Los perredistas se apresuraban a tratar de transformar el revés en victoria. El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, al entregar los resultados en el Senado, declaró:

“Tuvimos la consulta más concurrida en la historia de la Ciudad de México. Nunca en toda la historia de la Ciudad de México habíamos tenido tal cantidad de ciudadanos y ciudadanas que fueran a ejercer su derecho a votar, a opinar, a decidir el futuro de los hidrocarburos en México.

“El resultado de este ejercicio, en el que se contó con la asistencia del Instituto Electoral del Distrito Federal, así como con numerosas organizaciones no gubernamentales y un consejo ciudadano, que se invitó al proceso, arroja como resultado una inequívoca voluntad popular”, destacó.

El documento entregado por Marcelo Ebrard en el Senado contenía las siguientes cifras de la consulta realizada en la capital de la República el domingo 27 de julio

· Se instalaron 5599 mesas (el 99.73 por ciento del total.)

· No se registraron incidentes relevantes durante la jornada

· Un total de 826,028 ciudadanos respondieron la pregunta 1- De esos, 95,155 opinaron que si están de acuerdo con la participación de las empresas privadas en esas actividades (explotación, transporte, distribución, almacenamiento y refinación de los hidrocarburos.) 718,810 ciudadanos opinaron que no. habiendo 12,603 opiniones inválidas

· Respondieron a la pregunta 2 un total de 824, 216 ciudadanos. De esos, 119,637 están de acuerdo con que se aprueben las iniciativas relativas a la reforma energética que se debaten actualmente en el Congreso de la Unión. 692,189 opinaron que no, habiendo 12,390 opiniones invalidas.

***

Marcelo Ebrard entregó los resultados en un ambiente de estridencia. Fuera del recinto del Senado, un grupo de jóvenes panistas, pancartas en mano, descalificaban al jefe de Gobierno del Distrito Federal y repetían “Nunca más el News Divine”. Dentro del recinto parlamentario, la protagónica presidenta del PAN en el DF, Mariana Gómez del Campo, lo esperaba para entregarle un video con supuestas pruebas de las irregularidades cometidas en la consulta.

Afuera del recinto el ambiente se calentaba. Integrantes de la Asamblea de Barrios llegaron al edificio de Xicotencatl para arropar al alcalde. Apenas vieron las pancartas de los jóvenes panistas, se las arrebataron y las hicieron añicos. Eran un puñado de azules, la mitad mujeres, contra una escuadra de simpatizantes de Ebrard.

Gómez del Campo estaba decidida a arruinarle el acto. Llegó simultáneamente al Senado para entregar a su correligionario Santiago Creel, la copia del video en el que, asegura, se ve a una misma persona que vota 35 veces en la consulta. No pudo aproximarse a Marcelo. El que sí lo hizo fue el disuado local del PAN, Miguel Ángel Errasti. “Le entrego las pruebas de las irregularidades”, le dijo. El jefe de Gobierno prometió “investigarlas”

A Marcelo Ebrard lo acompañaban Víctor Hugo Círigo, presidente de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa; Javier González Garza, coordinador de los diputados del PRD; Carlos Navarrete, jefe de la bancada en el Senado y el propio Pablo Gómez.

A Pablo le molestaba lo que hacían los azules. “Sólo me resta lamentar que una fuerza política como es Acción Nacional, tan importante en este país, se haya rebajado, como se rebajó en la lucha en contra de la consulta popular y del voto público, en una maniobra que nos avergüenza”, declaró a los reporteros de la fuente.

En la trinchera de enfrente, Gustavo Madero, coordinador del grupo parlamentario del PAN en el Senado, también hacía declaraciones. “Los resultados son exiguos”, dijo al descalificar la consulta. “No tiene ninguna vinculación de tipo legal; es un acto político y yo me atrevería incluso a decir que es un acto partidista”, puntualizó.

Los resultados de la consulta fueron enviados por Santiago Creel a las Comisiones Unidas de Energía y de Estudios Legislativos, encargadas de dictaminar la reforma energética. El presidente de la mesa directiva aprovechó la presencia de Ebrard en el recinto legislativo para entregarle un punto de acuerdo en el que se le cita a comparecer por la tragedia en el News Divine.